sábado, 30 de octubre de 2010

Halloween

ORIGEN


La víspera de difuntos es de origen griego y posteriormente celta.

Esta celebración, como tantas fiestas paganas y con la instauración de la iglesia, Sambain fue demonizada, transformándose por los anglosajones en la fiesta de Halloween, donde los espíritus de los muertos tras ser invocados por el diablo hacían estragos libremente entre los humanos.

La Noche de Brujas o Halloween se celebraba hace más de 3000 años por los Celtas, quienes poblaban la antigua Inglaterra, Irlanda y el norte de Francia y el 31 de octubre celebraban el fin de año con el Samhain, una fiesta pagana y señalaba la llegada del invierno. Con la inmigración a los Estados Unidos de los irlandeses catolicos en 1846, llegó la tradición de Halloween al continente americano, donde los ritos que se practicaban durante la noche tenían un carácter purificador y religioso.

Los celtas iniciaban el año en la fecha del 1° de SAMONIS, que significa "reunión", y es el equivalente al 1° de noviembre. La llegada del cristianismo lo transformó en el día de Todos los Santos. SAMONIS se hizo samuin o SAMAIN en irlandés antiguo, y samhain en el moderno.

En el hemisferio norte, significaba el comienzo del año oscuro. Los celtas, como otros pueblos antiguos, empezaban los ciclos temporales por la mitad oscura: el día terminaba con la caida del sol y la jornada siguiente tenía su inicio con la oscuridad de la noche, el año nuevo comenzaba en esta fecha con el principio del invierno.

Los celtas creían que la frontera entre los mundos de los vivos y de los muertos se volvía incierta en la noche antes del Año Nuevo. La noche del 31 de octubre celebraban Samhain, fecha en la cual se creía que los espíritus de los muertos regresaban a la tierra.
Para ahuyentar a estos malos espíritus, los celtas se vestían con cabezas y pieles de animales mientras que los sacerdotes druidas realizaban sacrificios con fuego para celebrar el día de un modo más cristiano.

Durante la ceremonia del 31 de octubre los celtas se disfrazaban con las pieles de los animales sacrificados para sacar del pueblo a los demonios que los visitaban y poder regresar a la normalidad al día siguiente.
Las brujas y brujos se reunían para ofrecer sacrificios a Satanás, señor de la muerte, mediante ritos, actos sexuales y muerte. En la Edad Media se quemaban gatos negros por creerlos amigos de las brujas.

SIGNIFICADO DE HALLOWEEN

Para rendir homenaje a todos los santos que no tuvieran un día particular de celebración, en 834 D.C., el Papa Gregorio IV instituyó el 1 de noviembre en el día de Todos los Santos. Con el pasar de los años, estos festivales se combinaron, y al Día de Todos los Santos lo llamaron "All hallowmas" (la masa de todos los santos). La noche anterior se conoció como "All Hallows Eve" (Víspera del Día de Todos los Santos). Con el tiempo, su nombre se convirtió en Halloween. 

En la Edad Media comenzó la persecución de todos los ritos paganos por su presunta vinculación con el maligno. Con la bula papal Summis desiderantis affectibus, del Papa Inocencio VIII el 5 de diciembre del año de 1484, fue que se legitimó la persecución de brujas, tortura y ejecución, generalmente ardiendo en la hoguera, empezando así La Inquisición a perseguir la hechicería.
En 1717 se reunieron todos los druidas de Europa (quienes eran sacerdotes y maestros de los celtas) para inaugurar de nuevo el druidismo. Entre ellos existían los llamados "covens", quienes eran doce brujas y un sacerdote.

Se cree que recorrían casa por casa pidiendo un niño o una virgen para quemarlo en la gran fogata, los sacerdotes dejaban una fruta con una vela en su interior para prevenir que los demonios entraran y mataran a quienes habitaban ahí, a esto se le consideraba un trato. 


Si la familia se negaba a satisfacer la demanda, entonces los sacerdotes marcaban la puerta de la casa y esa noche Satanás tenía entrada libre para destruirlos, esto era conocido como "la treta" o "trato". 
 Se dice que incluso había quienes colgaban calabazas con muecas en las puertas de sus casas iluminadas con velas de sebo humano.
Esta interpretación cristiana fue la que degenero hasta convertirse en la fiesta Norteamericana que conocemos hoy día, donde los niños disfrazados de difuntos y diablos, van de casa en casa en busca de caramelos ante la amenazadora voz de "ofrenda o truco"